El año pasado las compras de carne vacuna de Brasil se redujeron 19% respecto de 2015. La crisis económica afecta a la demanda de carne.
Si bien todavía no se terminaron de computar los datos finales del 2016, analistas del vecino país estiman que las exportaciones perdieron ritmo así como también las importaciones debido a la menor demanda interna.
Según informó el diario Folha do Sao Paulo las compras desde el extranjero se redujeron a 61 mil toneladas lo que implica un gasto de 304 millones de dólares.
Dos años atrás el país importaba 75 mil toneladas por 476 millones de dólares según datos de la secretaría de Comercio Exterior.