Juan Manuel Garzón, economista Jefe de IERAL Fundación Mediterránea explica que el poder de compra de carne del salario de marzo fue el más alto en 8 años.
“Para los productores de hacienda y carne, la situación es positiva sólo si a los precios actuales de la hacienda y la carne el negocio de producir es sostenible en términos económicos. Y aquí es donde aparecen algunas dudas”, sostiene.
De acuerdo a estimaciones propias basadas en estadísticas del Ministerio de Trabajo de la Nación, el salario promedio de un asalariado formal del sector privado se ubicó en un nivel equivalente a 193 kilos de carne bovina (valor consumidor) durante el mes de marzo de 2018.
En este indicador participan, por un lado, el salario promedio de los trabajadores en relación de dependencia del sector privado y formal de la economía, que es relevado mensualmente por el Ministerio de Trabajo y Empleo de la Nación y donde han sido estimados los montos para los últimos meses (a partir del Índice de Salarios de INDEC), por el otro, el precio consumidor de la carne bovina, donde se toma como referencia un valor promedio de 6 cortes (asado, bife angosto, carne picada, cuadril, nalga y paleta) que releva mensualmente, entre otros, el IPCVA.
Si se compara con el mismo mes de años previos, a los efectos de controlar por alguna estacionalidad, se encuentra que el poder de compra del salario de marzo de este año es el más alto de los últimos 8 años; desde el 2010 hasta la actualidad no se veía un salario con tan buena relación de intercambio en esta época del año. Por caso, si se compara contra el período 2010-2012, la relación actual se ubica casi 30% por encima de la de esos años; también está un 6% arriba de los mejores años recientes (2013 y 2015).
¿Cuántos kilos de carne bovina compra un salario medio de la economía?*
* Salario del sector privado formal, aquel que informa el MTEySS (remuneración mensual normal y permanente); ante la falta de actualización, se estiman los salarios para 2018 con el IS de INDEC. Se utiliza como precio de carne bovina de referencia un promedio simple de precios consumidor de 6 cortes (asado, bife angosto, carne picada, cuadril, nalga y paleta).
Fuente: IERAL de Fundación Mediterránea en base a MTEySS, INDEC e IPCVA.
Desde la mirada del consumidor, que el poder adquisitivo del salario esté firme ya sea porque los salarios “están altos” y/o porque la carne bovina “está barata” es, si se quiere, indistinto, en cualquiera de los dos casos la situación actual es sin dudas favorable y una buena noticia. En última instancia, el interrogante que podrían tener los asalariados es cuánto durará esta buena relación.
Para los productores de hacienda y carne, la situación es positiva sólo si a los precios actuales de la hacienda y la carne el negocio de producir es sostenible en términos económicos. Y aquí es donde aparecen algunas dudas, particularmente en el primer eslabón de la cadena. En el último año y medio se ha observado un deterioro importante en los márgenes de la actividad ganadera, agravados por la sequía y el contexto financiero (elevadas tasas de interés). En algún momento del 2018, más probablemente hacia fines de este, los precios de la hacienda tendrán que reacomodarse hacia escalones superiores, en consecuencia también los de la carne, y habrá que ver cómo queda en ese momento la relación con los salarios. En el mientras tanto, la sugerencia es no perder la oportunidad de invitar a la familia y a los amigos a comer un buen asado!